lunes, 25 de mayo de 2009

Facho, amigo mío








Facho, amigo mío

Siempre he tenido debilidad por los fascistas. Al principio me chocan, digamos, los repudio, pero pronto me compadezco. Los veo solos, percibo su tristeza. No soy la madre Teresa de Calcuta, ni he pretendido serlo cuando he estrechado la mano de algún facho, aunque alguna vez tuve la secreta esperanza de que sería capaz de cambiar a uno y restárselo al mundo. Ahora simplemente dejo que las cirscunstancias me lleven y acabo siendo más amigo de lo que quisiera.

En general esas amistades repiten los patrones de conducta: entre chiste y chiste, notamos que conectamos bastante bien y que ya podemos ponernos motes: el mafia, el rojo, el Benito, el Mao. La abundante risa nos evade del enfrentamiento dialéctico y disfrutamos de nuestra compañía sin condiciones ni cuestionamientos. Me sonrojo si saca a relucir su certificado cuando, estando en un grupo de amigos variopintos, pone el grito en el cielo a favor de la pena de muerte o sale en defensa de Franco (“que no se me lo compare con Pinochet, por favor”, diría alguno de los que conozco) y procuro hacerlo callar recordándole que no se ha tomado la pastilla.

Cuando nos enzarsamos en discusiones como pasillos que conducen al enfado, cuando estas discusiones son trabadas por un dato que alguno de los dos no cree cierto, que impide avanzar en el debate y que lo ramifica hasta llegar a las sensibilidades personales, a las trancas infantiles, a los traumas familiares, entonces nos insultamos y nos mandamos al carajo. Mañana, que ya es otro día, hablamos de mujeres, de los diferentes tipos de cerveza y volvemos a caminar sobre el agua.

Hijos de micreros, neonazis, jóvenes falangistas, niñatos hijos de empresarios sin escrúpulos, todos son potenciales amigos míos, aunque con ellos forme una amistad que acabe desvaneciéndose en el tiempo. Alguna vez he pensado que esa evanescencia es producto de la ligereza obligada de ese tipo de afectos, pero pronto caigo en la cuenta de que con mis amigos progres, por llamarlos de algún modo, con los que compartimos una ética, con los que hablar es reafirmar el discurso, salvo casos especiales, tampoco conservo un apego duradero.

La relación de amistad con un “cabeza rapada” no puede ser simple, sino compleja por fuerza. Donde él dice “a ésta perra la partiría” tú debes leer “qué mujer más hermosa, la haría mía”. Donde tú dices “la música africana es la madre de todas las músicas”, él debe leer “las africanas también me la ponen dura”. Se trata ni más ni menos que de un sistema de comunicaciones complejísimo, que exije una lectura fina y códigos muy particulares, donde el silencio también juega un papel importante.

Sé que algunos pensarán que exijo poco de las amistades. O que ésta columna es una exaltación de mi bondad. O tal vez que en mí se esconde un facho que empatiza con los fachos desamparados. O bien que debiera mostrar más pudor al contar estas debilidades en un blog. O que simplemente esto no es noticia. Y la verdad es que tienen toda la razón.

11 comentarios:

  1. Qué temón, yo no lo puedo superar.

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  2. ... tal como en el sentido común de los racistas europeos, se escucha siempre la excepción ... los "rumanos (o magrebiés, sudamericanos, albaneces, gitanos, negros sub-saharianos, pakistaníes, etc.) son delincientes, claro que mi amigo rumano no, él es diferente" ... en Chile con los fachos pasa lo mismo.

    Ser facho es cultural ... como odiarlos también lo es (en el sentido atávico que implica el término) ... en Chile serás probablemente "facho" al nacer en una familia "facha" (donde se te explicó fachamente el mundo), como serás "comunacho" si naces en una familia bajo la hoz y el martillo (y se te explica que el futuro será un rojo amanecer) ...

    Ironicamente, de acuerdo a todos las personas que conozco del Este de Europa (quienes nacieron bajo la cortina de hierro), la figura de nuestros fachos la ocupan los antiguos comunistas (apoyaron a sus respectivas dictaduras, y justifican las violaciones a los DDHH, por ejemplo). Con la excepción de algún alemán oriental.

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  3. ¿y MOMIO? ¿es sinónimo de Facho?...
    lo que dice Santa Cruz Grau (tan largo su nombre estimado Juan Carlos)puede ser verdad como no, a lo mejor es facho por opción,no necesariamente va a venir de la cultura familiar; por ejemplo alguna configuración personal que te haga querer a la patria, el orden ,la jerarquía y al TATA.

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  4. Las tendencias políticas son formadas por una conjugación de experiencias personales, educación y, como han demostrado varios estudios recientes, genes. Ello no quiere decir, como publicaron algunos diarios, que se descubrió el "gen político", pero sí que la interacción de estos tres factores tiene un rol que supera con creces el hecho accidental de haber nacido en determinada familia -GB.

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  5. Con todo el respeto que me merecen los cientificos ... la teoria del Gen político ... es casi científica como las encuestas del Citizen

    ... en todo caso, el "describiento del Gen" se refería a una eventual predisposión a ser más conservador (y temeroso al cambio) o más liberal (y arriesgado)... lo que se leyó como izquierda o derecha. Eso sería lo genetico

    ... el discurso político aprendido es cultural, aquí la biología no juega ningún papel. Puede que no solo sea la familia, son los amigos, la escuela, el trabajo, la universidad, es decir los ambientes que frecuentamos ... etc.

    ... aun no conozco a hijo de milico chileno (en servicio activo entre 1973 y 1998), que sea declaradamente comunista y anti-pinochetista ...

    SCG

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  6. La biología sí juega un rol, tal como lo juega en virtualmente cualquier comportamiento humano, incluyendo interacciones sociales que antes se daba por descontado eran 100% producto del ambiente (no existe tal cosa). Lo del “gen político” es una interpretación pelotuda, tal como lo mencioné. Sin embargo, los estudios no son tan simplones como para identificar el miedo al cambio con ser conservador y la propensión al riesgo como liberal. Miden bastantes más factores que apenas dos rasgos de personalidad. –GB.

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  7. En la opinión política de las personas la genética (biología, por extensión) no juega ningún rol. Ello no es más que intención, neo-conservadora (de origen anglo-sajón) de encontrar patrones biológicos a conductas culturales.

    Enfrentados a la muerte de la "raza" como categoría social, ahora los biólogos nos bombardean con la idea de que los "genes" lo definen todo, incluso la cultura ... ya no podremos decir, eso grupo es racialmente inferior, ahora podemos decir ... ese indidivuo (esa mezcla genética) es inferior.

    ... de ahí que hablan de predisposición genética a X cosa. Que enfrentado a tales o cuales estímulos, nos haría más o menos: violentos (hay un estudio de las misma características que señala que en los negros, está presente en mayor proporción un gen que nos explicaría los arranques de violencia, y ello explicaría porque los negros son más delincuentes); más o menos conservadores (vaya uno a saber como lo definieron) ; más o menos "fieles" (hay un estudio que explica la infidelidad masculina genéticamente) , etc.... es el neo-lombrosisimo, que aprovecho la brecha dejada en la crisis de las ciencias sociales para meter la explicación genética a todo.

    ... La biología juega un rol en la conducta, pero no juega ninguno en la opinión política ¿Cuando nació el "gen" facho o rojo?, si ambas cosas son frutos de la evolución política y cultural de la humanidad.

    Existen muchos casos de gente muy conservadora, cartucha que es de izquierda ... y de fachos rupturistas ... Subordinar la posición política a la biología , sería como surbiordinar el gusto estético , el sentido común, los buenos modales ... etc.
    SCG

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  8. Sr. GB

    ¿Demuestro una "ignoracia supina" o una "gran ignorancia"? ... que son cosas distintas.

    Saludos

    SCG

    (le contesto luego ... lo había hecho, pero me traicionó el cursor)

    PD: a) A Cesare Lombroso aun se lo estudia en algunas facultades de derecho. b) El estudio citado es de los años 90 (no del año 10), y aparece en "Sociología" de Antonhy Giddens. c) Nunca se ha negado la importancia de la genética.

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  9. Mister,

    La RAE dice que la “ignorancia supina” es la que “procede de negligencia en aprender o inquirir lo que puede y debe saberse”. Sí, llamarlo negligencia es como musho aunque sí creo que es algo con que todo el mundo debiera familiarizarse. Sin caer en el corneteo, por lo general estoy de acuerdo con lo que escribes así que me sorprendió ver lo radicalmente en desacuerdo que estamos. Espero la respuesta y si se vuelve una lata, siempre se puede discutir en privado o definirlo con un cara o sello.

    A) A Lombroso seguramente se le estudia, pero dudo que se le tome en serio y seguramente se le caracteriza como una aberración, tal como muchas otras que también se estudian. Por lo menos así sucede en el contexto de la ciencia, al igual que cuando se habla de frenología y otras hierbas.
    B) Estoy curioso por el estudio que cita Giddens y de dónde lo sacó.
    C) No te acusé de negar la importancia de la genética, sino de caricaturizar a “los biólogos” como gente con una agenda racista que “nos bombardea con la idea de que los “genes” lo definen todo” lo que, al menos para mí, a todas luces no es efectivo.

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  10. No había prestado atención a este último comentario (distraído por la "publicación" de fragmentos del debate)...

    Dándole un par de vueltas al asunto creo que el problema no es tanto cuanto estamos en desacuerdo, como que cada uno esta tratando de decir una cosa, que no es necesariamente lo opuesto de la otra. Con un gran punto de acuerdo, el carácter complejo y multifactorial de la posición política.

    Pues yo nunca he negado la importancia de la genética, y tu nunca has dicho que la biología lo determinada todo (anulando la cultura), esa fue una dicotomía "emanada" de la interpretación del debate.

    De hecho, mi primera alusión no era contra tu idea, sino contra la idea del "gen político" (que no defiendes tu). Luego exageré caricaturizando a los biólogos (no todos) que creen en la determinación genética de la conducta, la cultura y hasta las posturas políticas. Los racistas no son los biólogos, sino algunos que amparados en descubrimientos biológicos sacan conclusiones sociales y culturales, que no se despreden necsariamente del descubrimiento.

    Con respecto a Lombroso, lo relevante es la transmisión de la idea que la delincuencia podría tener un origen biológico (el resto es solo anecdótico e historia). El estudio citado por Giddens no dice "los negros" son más delincuentes. Dice en los convictos hemos encontrado mayor presencia de A que entre los no-convictos, y entre la población afroamericana una mayor presencia de A, en comparación a la población blanca. Ese A se refería a la predisposición a la violencia. Se encuentra en el apratado sobre "conductas desviadas" (de la norma social), en el cual se explica toda la tradición de esta corriente en la Sociología anglosajona.

    Por nuevo-lombrosonismo no me refería a volver a medir cráneos, sino en reflotar la idea de la predisposición biológica a la delincuencia.

    Conversarlo en torno a una corrida de chelas es la mejor alternativa (y así dar forma real a la conversación de cura'os), pero dada la dificultad material, creo que el cara o sello, no es mala opción.

    Saludos

    SCG

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