Aprovechando el pase al área cedido por Hilgo Larton en este mismo blog, quisiera adentrarme en el castigado suburbio intelectual de lo esotérico aplicado al triste caso del Senador Flores, pues antes que cronistas o columnistas, somos seres humanos y no podemos negarle una mano a quien lo necesita. Es de Dios.
1.-
Lo más importante para escuchar bien a los espíritus es estar conectado con la propia espiritualidad. De no ser así, si este requisito no se cumple, aunque se disponga de una Ouija último modelo, no es posible la comunicación con el más allá. Incluso puede conducir a engaño, digamos, puede distorsionarse el mensaje del espíritu y dejar al medium confundido, nervioso.
Un caso flagrante de desconexión espiritual: el senador Fernando Flores del PPD. La falta de tino, el muñequeo, la matonería, son síntomas claros de un desorden espiritual crítico, puede que crónico, que le afectaría seriamente a la hora de poner en marcha esa Ouija que parece tener en casa o en la sede central del Partido.
Lo que pudimos observar y escuchar en esa entrevista que concedió a la CNN Chile, la forma en que acabó y la triste humillación a la que se sometió el político motu propio, son también los efectos más frecuentes de quien deja de asistir a sus sesiones de yoga, degenerándose la musculatura meditativa, abriéndose las puertas a la violencia y al desvarío.
Chile (o Chilistán para los cínicos) es intrínsecamente una nación mística. Partamos por lo básico, por favor.
Los lectores recordarán bien que algunos personeros de la derecha chilena, cuya conexión espiritual consigo mismos es óptima, reconocieron contar con un canal de comunicación directa con Jaime Guzmán, mártir.
2.-
El caso del señor Flores es particularmente grave, pues el dibujo de sus movimientos espirituales en la historia de la política chilena es, por decirlo de algún modo, pendular. Y el péndulo, como ya sabrán los místicos redactores que comparten éste místico espacio, es el símbolo de la muerte. Pero ¡ojo! Flores aún tiene una chance. Porque todo símbolo es equívoco. Así como el péndulo va y viene, la muerte, la podredumbre es también renovación, morir es volver a nacer.
Pero veamos qué dijo el susodicho justo antes de reaccionar como un poseso durante la entrevista para la CNN:
“Yo me sigo sintiendo allendista y a Allende no le gusta la gente que pasa factura falsa, no le gusta la gente que miente o la gente que hace negociados. No le gustaba la gente que hiciera tanta cosa que hoy día a mí me molesta…”.
Senador Flores: confundir las propias veleidades con la doctrina moral del profeta al que se recurre no es sano para un exégeta. Corre usted el riesgo de ser poseído por un doble, por un espejismo que no es más que su propia aura maligna volcada en ese otro yo. Corre el riesgo de parecer un farsante, no digamos un mentiroso, porque seguramente no se dará usted cuenta de que está poseso. Pero vergüenza: ésa es la palabra, el código que abre la confianza.
3.-
Ánimo, senador, y que no se diga que la política chilena de hoy no tiene mística o que los políticos chilenos no prestan atención al espíritu nacional, a sus secretas voces de ultratumba.
1.-
Lo más importante para escuchar bien a los espíritus es estar conectado con la propia espiritualidad. De no ser así, si este requisito no se cumple, aunque se disponga de una Ouija último modelo, no es posible la comunicación con el más allá. Incluso puede conducir a engaño, digamos, puede distorsionarse el mensaje del espíritu y dejar al medium confundido, nervioso.
Un caso flagrante de desconexión espiritual: el senador Fernando Flores del PPD. La falta de tino, el muñequeo, la matonería, son síntomas claros de un desorden espiritual crítico, puede que crónico, que le afectaría seriamente a la hora de poner en marcha esa Ouija que parece tener en casa o en la sede central del Partido.
Lo que pudimos observar y escuchar en esa entrevista que concedió a la CNN Chile, la forma en que acabó y la triste humillación a la que se sometió el político motu propio, son también los efectos más frecuentes de quien deja de asistir a sus sesiones de yoga, degenerándose la musculatura meditativa, abriéndose las puertas a la violencia y al desvarío.
Chile (o Chilistán para los cínicos) es intrínsecamente una nación mística. Partamos por lo básico, por favor.
Los lectores recordarán bien que algunos personeros de la derecha chilena, cuya conexión espiritual consigo mismos es óptima, reconocieron contar con un canal de comunicación directa con Jaime Guzmán, mártir.
2.-
El caso del señor Flores es particularmente grave, pues el dibujo de sus movimientos espirituales en la historia de la política chilena es, por decirlo de algún modo, pendular. Y el péndulo, como ya sabrán los místicos redactores que comparten éste místico espacio, es el símbolo de la muerte. Pero ¡ojo! Flores aún tiene una chance. Porque todo símbolo es equívoco. Así como el péndulo va y viene, la muerte, la podredumbre es también renovación, morir es volver a nacer.
Pero veamos qué dijo el susodicho justo antes de reaccionar como un poseso durante la entrevista para la CNN:
“Yo me sigo sintiendo allendista y a Allende no le gusta la gente que pasa factura falsa, no le gusta la gente que miente o la gente que hace negociados. No le gustaba la gente que hiciera tanta cosa que hoy día a mí me molesta…”.
Senador Flores: confundir las propias veleidades con la doctrina moral del profeta al que se recurre no es sano para un exégeta. Corre usted el riesgo de ser poseído por un doble, por un espejismo que no es más que su propia aura maligna volcada en ese otro yo. Corre el riesgo de parecer un farsante, no digamos un mentiroso, porque seguramente no se dará usted cuenta de que está poseso. Pero vergüenza: ésa es la palabra, el código que abre la confianza.
3.-
Ánimo, senador, y que no se diga que la política chilena de hoy no tiene mística o que los políticos chilenos no prestan atención al espíritu nacional, a sus secretas voces de ultratumba.
Para mí que a Flores le da lo mismo, al final con sus millones en gringolandia, el dimes y diretes de la pequeña república de Chilistán le dan risa, eso sí que creo que en su practica con la ouija, lo poseyó DON JAIME, grave me resultó escuchar a un panelista en "Estado Nacional" que la actitud de Flores era algo moralmente bueno,además que allí si que veíamos la tan ansiada reconciliación que un ex preso político, mandado a la isla Dawson ane la mano con sus ex abversarios políticos,era la reconciliación en pleno...
ResponderEliminarSi al tongua le da lo mismo el qué dirán, ¿porqué trató de hacerse el simpático anoche en Tolerancia Cero? Si con sus millones le basta, ¿porqué hace política?
ResponderEliminarel GLAMO-URRR...de la cosa no más...
ResponderEliminares parecido al caso de Zaldivar, la imagen que tiene de su propio peso político y valoración por parte de la "gente" esta absolutamente disasociada de la realidad...
ResponderEliminarInteresante este tema, pero hay muchas formas de creer en estas situaciones, lo que debemos hacer es buscar los consejos espirituales, rituales, hechizos en un foro de confianza como picantito que brinda consejos útiles.
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