Al día 15 de agosto, y siguiendo la tendencia iniciada en noviembre del año pasado cuando se desató la crisis subprime, los fondos de pensiones privados chilenos (AFP) acumul
an una pérdida real de casi 15 mil millones de dólares (http://www.cendachile.cl/perdidas_afp). Lo anterior alude a dinero que antes hubo en las cuentas e inversiones de las AFP y que hoy se ha ido esfumando producto de la crisis financiera mundial. Pero el discurso que se instaló en la sociedad chilena es que no se trata de pérdidas reales sino que se variaciones normales dentro del juego de las finanzas, que se recuperarán rápidamente.Hay dos formas de instalar esta mentira y evitar que la sociedad chilena se cuestiones acerca del sistema previsional, a diferencia de lo que sucede en otros países como Argentina donde se estatizó parte de los fondos privados de previsión y jubilación, o Estados Unidos donde una reforma a la chilena no ha logrado avanzar al ritmo que quisiera el gran capital. La primera falacia consiste en poner sobre el tapete la recuperación de la tasa de rentabilidad de los fondos de pensiones y ocultar las pérdidas reales. La segunda falacia consiste en decir que los fondos de pensiones deben pensarse a largo plazo y no en lo inmediato, por lo que variaciones coyunturales tienen poca significancia.
Imaginen que se trata no de fondos sino que del crecimiento de un niño. Producto de una crisis, en su casa falta comida y el niño deja de crecer; es más, su tamaño se reduce. La madre lleva al niño al médico y éste le responde: no se preocupe porque cuando pase la crisis el niño comenzará a crecer de nuevo; es más, agrega el médico, el crecimiento del niño hay que pensarlo a largo plazo, lo importante es que tenga un tamaño adecuado cuando llegue a los 18 años. Lo cierto es que el niño no llegará a los 18 años midiendo lo que hubiese medido si nunca hubiese dejado de crecer o si nunca hubiese perdido tamaño.
Con los fondos pasa lo mismo. Hay gente en edad de jubilar que está postergando su derecho de jubilación a la espera de que su fondo tenga una recuperación que le asegure una pensión menos mediocre, lo que desmiente la falacia de que el enfoque que interesa es a largo plazo: claro, a largo plazo para los que empiezan a cotizar, no para los que llevan 30 años cotizando. Este es el escándalo de fondo.
El escándalo de forma es que hoy por hoy suena en las radios chilenas una publicidad de las AFP donde aparece la actriz Delfina Guzmán convenciendo al público chileno de estas dos falacias que se inventaron para ocultar la realidad del sistema previsional chileno, evitar su reforma, limitar sus garantías y frenar el desarrollo de una AFP estatal. Delfina Guzmán, sin lugar a dudas, se dejó convencer por su hijo, ex Ministro de Hacienda de Lagos. Delfina Guzmán olvidó, sin lugar a dudas, que cuando era una de las figuras del Teatro Ictus y un rostro de la resistencia en contra de la dictadura, denunciaba la expropiación de los bienes sociales llevada a cabo por la dictadura, y donde la privatización de los fondos previsionales era el mejor ejemplo de aquello.
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Voy a utilizar palabras de otro para contestar esto, V.Vadich dijo alguna vez :"el problema es ahora peor que nunca. Porque la filosofía heredada del mercado enseña que todos son capaz de todo, indistinto de los talentos, oportunidades o contactos." osea la Delfina,Noguera, todo el mundo...¿que queda?
ResponderEliminarQué buen tema. Lo más increíble de todo es la ignorancia generalizada sobre un asunto que es lejos más relevante para los chilistaníes que todos los otros “temas del mes” diseñados para indignarse y mandar cartas al diario (p. ej: Cisarro, el Transantiago, la gripe aviar, etc.). Esto tiene que ver con la jubilación y la calidad de vida de los trabajadores y sin embargo la información escasea, los medios apenas lo analizan y si no es por la gente del Cenda (que no goza precisamente de la tribuna de otros “analistas” que hasta poco antes de la crisis recomendaban no cambiarse de fondo) sencillamente tendríamos que confiar en los pronósticos optimistas de estos astrólogos con título de economista.
ResponderEliminarSi bien las AFP fueron implantadas a la fuerza a comienzos de los 80, los multifondos fueron creados en plena democracia y sin que virtualmente nadie se preguntara por las implicancias de apostar la jubilación de los trabajadores en el hipódromo. Tal como destaca Hilgo, ahora nos están cuenteando con que las pérdidas son una coyuntura que eventualmente se va a corregir, pero no mencionan que el sistema nunca ha redituado para la mayoría de los chilenos. Solo el 11 por ciento de la fuerza laboral chilena contribuye regularmente (12 meses en el año) a los fondos de pensiones. La gran mayoría de estas personas no va a tener una pensión decente cuando se jubile.
Con todo lo que se critica a EE.UU por la desregulación financiera y el control de los intereses empresariales sobre la clase política, cuando hace tres años Bush intentó privatizar Social Security la oposición fue tal que la iniciativa no alcanzó ni a despegar en el Congreso. En Chilistán, por el contrario, preferimos vivir en la oscuridad (en cualquier encuesta es una garantía que la mayor parte de la gente no puede responder qué quiere decir la sigla AFP ni menos explicar qué son los multifondos) y aceptar pasivamente que jueguen con nuestra jubilación en un casino.
Que Delfina Guzmán aparesca blanqueando a las AFP me parece turbio, tanto como que otras actrices o actores "progresista" que venden su imagen para blanquear farmacias y así...Ahora que allá sido su hijo quien la convenza, me genera ciertas dudas. Reconosco que hablo desde la ignorancia,pero me parece que el susudicho no es muy amigo de las AFP. Recuerdo que siendo ministro, argumentaba sobre la necesidad de que sus directorios tuviesen el mismo marco normativo de las empresas públicas, en tanto su negocio se sustentaba en aportes que todo los chilenos que trabajan remuneradamente realizan obligados por la ley. Más allá del detalle, me da la imprensión, insisto desde la ignorancia, que la posición de Eyzaguirre respecto a las AFP, las isapres y los impuestos no es asimilable a la de José Piñera, y que si su madre aparece dónde aparece es porque a ella si que las AFP le aseguraron una buena jubilación.
ResponderEliminarLa creación del sistema de multifondos fue parte de la reforma al mercado de capitales que impulsó Eyzaguirre como ministro de Hacienda en 2001 y 2002. Más allá que en su momento haya expresado reservas ante cosas como flexibilizar el límite de inversión extranjera de las AFP, el hecho concreto es que parte de su agenda fue profundizar y refinar un modelo de seguro social que es un desastre.
ResponderEliminarEn el marco de la creación de los "multifondos" (Lagos, 2001), muchos años antes de que explotara la crisis financiera y de la última reforma previsional (Bachelet, 2008), se propuso "pensar" en modificar (progresivamente) el sistema de pensiones, donde existiera la posibilidad de acceder a un "sistema solidario" y no exlusivamente un sistema de "capitalización individual".
ResponderEliminarSin embargo, dichas propuestas fueron catalogadas de "poco realistas" y en vez de pensar el sistema, se optó por profudizarlo. Cuando en estricto rigor, lo único que hacían era poner el acento en asegurar pensiones dignas a los trabajadores (asumiendo el Estado un rol más activo), en vez de preocuparse solo de asegurar la rentabilidad de las AFP.
Pero claro, en aquel entonces no se vislumbraba la posibilidad de una crisis, y desde el Estado se nos llenaba de palabras de optimismo: "Nos reunimos para celebrar los 21 años de un sistema que ha funcionado y ha resultado exitoso y que ahora lo perfeccionamos ..." (Lagos, 2001)
Varios años después, en 2008, se replanteó la necesidad de "cambiar" el sistema de pensiones. Pero su resultado final fue una reforma "cosmética", se corrigieron algunos absurdos y se garantizaron algunos pisos mínimos. Pero no se enfrentó el problema de fondo.
Hoy. Tal como señala Hilgo, las promesas de las AFP se desvanecieron y el sistema no está en condiciones de asegurar jubilacioenes dignas a un gran % de los trabajadores.