miércoles, 22 de julio de 2009
La espina que nos quieren clavar
Por El Economista Marginal
En época electoral se dicen muchas sandeces y gratuidades, pero la propuesta del Senador Alberto Espina de “derechos de la víctima” contiene suficientes elementos para configurar un atentado no sólo al Estado de Derecho, sino a la inteligencia de los electores.
Disfrazada de buenas intenciones, se plantea como oposición tácita a los derechos del acusado, el que, recordemos, solo es culpable cuando el debido proceso lo comprueba. El senador se plantea además como adalid de las víctimas, versus “la” adalid de los delincuentes, la Defensora Nacional, a quien en un arranque de machismo decimonónico llama “doña Paula Vial.” Pues bien, no hace falta ser abogado ni doctor en derecho procesal para saber que sus “derechos de la víctima” son una mera cantinflada electoral. Para ello existe una fiscalía, dotada de recursos humanos y materiales (se podrán incrementar, pero eso es otro debate) y un aparato policial financiado a través del presupuesto de la República. Punto.
Pero vuelvo a lo siniestro del planteamiento discursivo subyacente del Senador: bajémosle los derechos a los acusados (ya que son por definición culpables)… dejemos de financiar los abogados que defienden a esa gentuza. ¡Basta, hasta cuándo! El problema radica en que usted y yo, querido lector(a), nos enteramos todos los días de una violación de domicilio + robo con violencia en el sector poniente de la capital. Todos los días. Lo que rara vez se nos cuenta son los casos de falsas imputaciones y condenas, que generalmente recaen en los miembros más desvalidos de la sociedad. Si nos llegamos a enterar, es por la Defensora Nacional, que lo viene diciendo hace tanto tiempo en medios alterntivos, que los del "mainstream" recién han comenzado a enterarse.
No vamos a entrar en el tema de la Caza de Brujas, que da para largo. Lo que no hay que dejar pasar son los ademanes para la galería. No haga circo con cosas serias, Senador, y la próxima vez que se dirija o mencione a una autoridad del Poder Judicial, le recomiendo dejar a un lado el género y ceñirse al cargo. O muchos ciudadanos nos veremos tentados a llamarlo a usted “don” Espina. La que nos quieren clavar.
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Solo una cosa, QUE BUENO QUE VOLVIÓ!!!
ResponderEliminarse le extrañaba señor ECONOMISTA MARGINAL...
del señor Espina solo una cosa ¿Senador de que region es?pues más parece de Santiago oriente que otra cosa, además que tiene a sus guardaespaldas que eso ya da risa...necesita acordarse de su circunscripción alguna vez...