domingo, 12 de julio de 2009

Elecciones mexicanas al tacho de la basura





Por Hilgo Larton desde el DF




Ya ocurrieron y pasaron al olvido las elecciones en México. La abstención (en cuyo debate estéril nos enfrascamos con otro corresponsal de El Citizen) fue superior al 50%, el voto nulo cercano al 6%, pero la sensación de ilegitimidad se disipó en el aire como un peo. No interesa aquí volver a esos temas ni quiere El Citizen que vuelva a irritar a la audiencia a través de afiebrados posteos o comentarios (sí, me retaron).



Lo que quiero comentar, a ver si estimula a alguien, es la simpleza del pensamiento de los votantes. El PAN, en el poder desde el 2000, fue castigado por el electorado ni más ni menos que transformando al PRI en la primera fuerza política del país. Por un instante imaginé que ganaba Piñera y que, un período después, se le derrota en favor de Frei. Los votantes, acá y acullá, en los tiempos que corren, son esencialmente conservadores. Quizás quedan en la memoria colectiva los duros tiempos que siguieron a las revoluciones sesenteras, la cosa es que pocos votaron por la denominada izquierda mexicana, y menos derramaron lágrimas por ella.



Y con este párrafo termino para que nos les “dé güeva” seguirme leyendo (remitirse al breve diccionario de lo que no aprendimos viendo el Chavo del 8): el hito notable de las elecciones mexicanas, sin lugar a duda, fue el resultado obtenido por el partido Verde Ecologista, afiliado a la internacional de partidos homónimos, que se transformó en la cuarta fuerza política nacional y en la tercera en algunos estados como Jalisco, haciéndose de 22 diputados en el parlamento federal. Su lema de campaña tuvo tres ideas, simples, claras, y que se repitieron hasta el cansancio: pena de muerte para los delincuentes, que el gobierno te pague las medicinas, y que el gobierno te pague estudios de inglés. Es como para llorar, ¿o no?



1 comentario:

  1. Monsieur:

    Dicen que la capacidad de asombro no hay que perderla nunca, pero no puedo evitar pecar muchas veces en este sentido.

    No me sorprende que la "izquierda" no haga llorar y menos votar a nadie, porque es una entelequia tan codificada, tan llena de matices, que pocos se dan el trabajo de entenderla.

    Por lo mismo, no estoy de acuerdo en considerar simple el pensamiento de los votantes y no sé si alguna vez fue complejo en el sentido en que lo propones.

    Creo que la dejación política y lo que parece una simpleza, responde a una alteración profunda en la idea que se hace el votante de la macro-política y esto, que parece de perogrullo, creo que será el germen de nuevas formas de ejercer el poder, tal vez más atomizado, dividido en grupos más reducidos donde las decisiones tengan un efecto más directo e inmediato sobre la cotidianeidad de las personas.

    Cierto es que no se podrá acabar con la macro política, entendida como el debate de los relatos universales, de los grandes proyectos humanos. Y aquí no puedo evitar traer a mi terreno el tema: la macro política es ficción, y como tal, no he visto propuestas que adapten la trama al interés público, sino solamente al interés del propio poder.

    Pese a ello, y me estoy dando cuenta que sueno optimista, de los momentos críticos nacen propuestas que ponen al día el sistema en relación a la mentalidad de los seres que lo construyen.

    En Andalucía he visto un experimento al que no le he seguido mucho la pista pero que creo apunta en esa dirección: "presupuestos participativos" es un proyecto de la Junta de Andalucía, para poner en manos de vecinos y organizaciones civiles, la decisión respecto de las inversiones e incluso de las medidas de orden público de una zona o distrito. Hasta ahora, Centros cívicos, teatros y centros deportivos han sido construídos tras ser acordados en estas instancias. Me imagino que habrá más casos parecidos en otros sitios.

    Me parece que atomizar las decisiones práticas podría ser una forma de colar las aguas políticas, de transparentarlas.

    Como este es un posteo y no un ensayo (lo recorté, por eso eliminé el anterior), no iré más allá, sólo dejo este nostradámico comentario.

    un abrazo

    pd: no se enoje.

    ResponderEliminar

Creative Commons License
Citizen Almeida by Andrés Almeida is licensed under a Creative Commons Atribución-No Comercial-Sin Derivadas 2.0 Chile License.